Allá por el verano de 2016, la marca Sueca Hasselblad anuncio un nuevo modelo, un modelo que venia a cambiarlo todo, a redefinir los segmentos de cámaras profesionales. Había nacida la primera cámara sin espejo con sensor de medio formato, la Hasselblad X1D.
Mucho se ha visto de ella desde entonces, de su sensor CMOS de 50 megapixeles y 43,9mm x 32,9mm, las capacidades Wifi + GPS, de su pantalla táctil de 3,0″ o su capacidad para disparar a sensibilidad ISO que llegan hasta los 25.600 ISO. Pero la Hasselblad X1D no es solo eso, no son solo una especificaciones técnicas vacías. La Hasselblad X1D es una filosofía, un diseño, un herramienta de trabajo, es la excelencia.
Empezando por el concepto nuevo de una cámara sin espejo, con un sensor de medio formato, un visor electrónico y la posibilidad de controlar todo ello con una pantalla táctil. Ni que decir tiene que las Hasselblad son cámara dirigidas a profesiones y grandes apasionados de la fotografía. Son cámaras que se aproximan a los 5 dígitos y de ahí que la apuesta por estas especificaciones sea algo muy osado. Pero todos los complejos, todos los prejuicios quedan olvidados nada más tocar la cámara.
El cuerpo o mejor dicho, la cámara, esta envuelta en un armazón de aluminio, afilado, bien acabado, elegante, con guiños a la serie V de Hasselblad. El tacto de cada rueda o botán, derrocha elegancia y calidad, así como la resolución y manejo de la pantalla táctil. Es una Hasselblad, una cámara pensada para usar en estudio, pero gracias a su tamaño compacto y peso ligero podemos empezar a pensar en sacarla a la calle.
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Pero no todo son flores, hay cosas en las que Hasselblad debe trabajar y lo digo, conscientemente de que la unidad que he probado no esta terminada. Hay cosas en el menú, en el manejo, que te dicen «ten paciencia estoy aprendiendo». Pero claro, la cámara definitiva llegara al mercado a finales de Enero previsiblemente. Una de las pocas cosas, que he notado con margen de mejora es el visor, un visor que a priori tiene buena definición pero que sufre mucho en condiciones difíciles de luz, eso sí, a diferencia que otras sin espejo responde realmente rápido a los cambios de ajustes a través de las ruedas.
Un bonito reto el que se han propuesto desde Suecia los de Hasselblad y más bonito aun, es ver como lo han resuelto. Como te he comentado la cámara llegara en breve al mercado por un precio que rondara los 9000€ solo el cuerpo, un sueño para la mayoría.
Y para no dejar de soñar, te dejo algunas imágenes brutas en RAW, directamente de esta unidad de pre producción, para que admires la definición, resolución y calidad de las fotografías tomadas con esta Hasselblad X1D.
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